miércoles, 28 de noviembre de 2012

CINEFÓRUM DE SOBREMESA (porque el cine nos alimenta...)
Hoy: La vivienda en el Cine Español, (Años 50-60)


Antes de nada, queremos dedicar esta entrada a todas las personas que simplemente querían tener un hogar y se han visto atrapadas en esta maraña del mercado inmobiliario, a las víctimas de esta estafa, a quienes están en proceso de desahucio, a quienes sufren cada mes por poder pagar el alquiler o la hipoteca, a quienes luchan y ayudan a paralizar desahucios y a que nadie se quede sin un sitio donde dormir, a quienes han perdido la vida arrastradas por la situación...

Pasa el tiempo, pero hay problemas que de un modo u otro, con sus peculiaridades en cada momento concreto, siguen presentes.

El asunto se torna grave cuando estos problemas atañen a derechos tan básicos como tener un techo, un lugar asequible donde poder vivir con unas condiciones mínimas.

Y es que el tema es espeluznante en el momento en que se prima la rentabilidad, los beneficios económicos y los intereses de unos pocos sobre las personas; cuando las leyes se tuercen hacia el lado contrario de donde están quienes menos tienen; cuando un sistema deshumanizado se olvida de que hay cosas con las que no se debería jugar.

Han pasado muchos años desde que se rodaron las películas de las que vamos a hablar en esta entrada. Muchas cosas han cambiado en este país desde entonces. Otras, lamentablemente, no tanto como cabría esperar.

Como veréis, somos breves en el comentario de cada película. Si os apetece, luego vamos desarrollando diversos aspectos en los comentarios.

Vamos a empezar este recorrido con 'El inquilino', película de 1957 dirigida por José Antonio Nieves Conde y protagonizada por Fernando Fernán Gómez y María Rosa Salgado.

En esta descarnada crítica, la familia formada por Evaristo, Marta y sus cuatro hijos vive de alquiler en un piso de un edificio que va a ser derruido. Al verse desahuciados, intentan buscar un lugar donde realojarse que se adecue a sus necesidades y posibilidades, pero la tarea se torna imposible.

Nieves Conde toca múltiples temas: especulación inmobiliaria, complejidad buro- crática, el juego de los bancos, cómo afecta la situación a la relación familiar... Digna de mención es la solidaridad de los albañiles que tienen que derribar el edificio con la familia. Y es que, como dice uno de ellos: "Si los pobres no nos ayudamos..."

'El inquilino' llegó a estrenarse, pero al ministro de vivienda le cayó como un puñetazo en el estómago y obligó a retirarla de cartel para modificar varias partes del metraje, eliminar ciertas frases y escenas y cambiar totalmente el final, imponiendo uno feliz y esperanzador.

Rescatamos unas palabras de García Escudero en referencia a este filme: "La única consecuencia de una sociedad exclusivamente atenta a la ganancia inmediata es, en efecto, que quienes no están en condiciones de ofrecer tal ganancia se vean con su pobre ajuar en medio de la calle".



De un año después, también protagonizada por Fernando Fernán-Gómez y dirigida por él mismo, tenemos 'La vida por delante'. Le acompaña como actriz protagonista Analía Gadé.

Antonio y Juanita se casan nada más terminar sus respectivas carreras. Sueñan con abrirse camino en la vida y estar juntos en su propia casa.

Con mucho humor, Fernán-Gómez nos cuenta las dificultades de encontrar un trabajo estable y mucho menos relacionado con los estudios cursados y de conseguir una vivienda asequible para poder independizarse total- mente de la casa de los padres.

Al final encuentran un lugar donde vivir, comprando un piso aún no construido. Y ahí la película tiene una de sus críticas más brillantes. Cuando llega el momento de ver el piso y entrar a vivir, se encuentran con que no es exactamente como lo habían imaginado: pisos construidos con paredes y techos "de papel", donde estirando la mano puedes tocar al vecino de enfrente, con habitaciones en las que no cabe una caja de cerillas... Estupenda también, por cierto, la guasa de Fernando Fernán-Gómez con las orlas de los protagonistas.

Según Fernando Fernán.Gómez, 'La vida por delante' es una "sátira de lo que podríamos denominar la chapuza española".

Entre los actores que aparecen en la película, merece la pena recordar la escena del gran José Isbert como testigo de un accidente. Una breve pero entrañable aparición.



Con guión de Rafael Azcona y Marco Ferreri, nos encontramos con 'El pisito', de 1959. Para el guión tomaron como base una novela de Azcona: "El pisito. Historia de amor e inquilinato".

Aunque figuran como directores el italiano Marco Ferreri e Isidoro M. Ferry, al parecer el Ministerio de Cultura forzó a los productores a incluir a Ferry (productor de Documento Films) como co-director, debido a la condición de extranjero de Ferreri.

Petrita (Mary Carrillo) y Rodolfo (José Luis López Vázquez) llevan doce años de noviazgo. Están esperando para casarse a encontrar un piso donde vivir, ya que ella no quiere vivir realquilados, y los precios de los pisos en venta y los alquileres son muy elevados.

Rodolfo vive realquilado en casa de Doña Martina, una mujer muy mayor que paga a su casero una renta antigua. La buena señora quiere que Rodolfo herede el contrato de inquilinato cuando ella muera, pero la ley no está de su parte.

Además, el casero está esperando a que ella muera para derribar el edificio. La única solución posible parece pasar por casarse con doña Martina para heredar la renta y que el casero no pueda echarle.

Vemos así que Ferreri y Azcona no solamente tocan el tema de los elevados precios de la vivienda y los realquileres. sino que además plantea el tema de la especulación inmobiliaria.



De nuevo con Azcona metido en labores de guión junto con Ennio Flaiano y Luis García Berlanga, queremos recordar 'El verdugo' (1963), dirigida por Berlanga y protagonizada por Emma Penella, José Isbert y Nino Manfredi.
A pesar de que Berlanga quería a José Luis López Vázquez para el papel de José Luis (Nino Manfredi), tuvo que ceder y aceptar al italiano por tratarse de una coproducción con Italia.

Respecto al tema que estamos tratando, recordemos que uno de los motivos fundamentales que hacen que el personaje de Manfredi acepte el trabajo de verdugo es conseguir un piso del ministerio.

Cuando se le requiere para un ajusticiamiento, José Luis se debate entre aceptar o nuevo oficio o dimitir como verdugo, lo que supondría la pérdida de la vivienda. Todo un dilema.

De todos modos, para más información sobre esta película os remitimos al Cinefórum que le dedicamos a ella sola hace tiempo.



'Historias de Madrid' no estaba anunciada para este Cinefórum, pero hemos decidido añadirla por varios motivos: obviamente, porque uno de los temas que trata se adecua perfectamente, que he conseguido verla antes del Cinefórum y que sirve como homenaje al recientemente fallecido Tony Leblanc.

Dirigida por Ramón Comas en 1958, es una película en la que aunque destaca un poco la historia relativa a Mari Pepa y Pablo, no hay un claro protagonista. Cuenta entre otros actores y actrices con Tony Leblanc, Licia Calderón, Mario Morales y Antonio Riquelme.

La película comienza con la voz en off de La Cibeles narando la historia, lo cual tiene guasa. Y acto seguido vemos al dueño del edificio entrando en una iglesia para pedir a San Nicolás que se caiga el inmueble para poder construir un edificio de doce plantas en el solar. Pero resulta que una de las vecinas también está rezando al mismo santo para lo contrario.

Ramón Comas nos muestra algunas historias de las personas que viven en esa construcción ansiando que no se derrumbe o que llegue una respuesta satisfactoria del Ayuntamiento respecto a unas viviendas que han solicitado para mudarse.

Aunque es una película entretenida no me ha acabado de llegar. No perdono la parte "tunera"... ¡Qué horror! Pero quizá uno de los mayores problemas que le he encontrado es  que es muy poco crítica y demasiado patriotera. Se pasa de indulgente con el Ayuntamiento y el especulador dueño del edificio. Le falta dar más caña y más mala leche. Pero como curiosidad, merece la pena echarle un ratillo.

Eso sí, muy buena la parte donde toda la gente de dentro del edificio se une en pie de guerra contra los bomberos y el dueño que acuden con una orden de derribo.




14 comentarios:

  1. El cine italiano tiene también dolorosas muestras de la depredación inmobiliaria: "Milagro en Milan" (De Sica) "L'onorevole Angelina" (Zampa) y seguro que muchas más. Vivimos en una sociedad en la que no hay culpables, en la que todo el mundo hace lo que puede, en la que se está presionado por las circunstancias, en la que todo tiene una explicación. Tiempos duros los que nos esperan.

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    1. La que tenemos encima es terrible. Y de lo que nos espera me temo lo peor :-(

      Como dices, en el cine italiano hay muchas películas que versan sobre esta temática. Aparte de las que nombras tengo ahora en la cabeza 'El techo' y 'Umberto D.' de De Sica y 'Las manos sobre la ciudad' de Francesco Rosi.

      La idea original era hacer una entrada con películas de varios países y varias épocas, pero se hacía eteeeeeerna.

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  2. Un gran aplauso por esta estupenda entrada y el repaso de todas esas pelis (alguna reconozco que no he visto, como Historia de Madrid). Lástima que lo que es virtual y guionizado sea por desgracía algo tan "de moda". Acabo de desayunar con la noticia de otro suicidio por culpa de impago. En la depresión del 29 los que se tiraban por las ventanas eran los banqueros, aquí se lo han montado muy bien para que... la vida siga igual.
    Yo, por hacer un aporte, voy a citar una película que es una hostia en toda la cara y que ha pasado bastante desapercibida, y parece que se adelanta o ve venir el "donde nos hemos metido". Se trata de La influencia, de Pedro Aguilera. Quién tenga un rato que lo pierda con esta película, eso sí, la sensación de hastío vital que te va a quedar de residuo, estará, o por lo menos conmigo estuvo, varios dias rondandome la cabeza.

    Lo dicho estupendo post.
    Roy

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    1. Gracias, Roy Bean.

      El tema de los suicidios provocados por no poder pagar la vivienda (alquiler o hipoteca) es terrible. Ya empiezo a perder la cuenta de los casos que han salido a la luz. Y no quiero ni pensar en cuántos ha podido haber que no han trascendido, que seguro que son unos cuantos :-(

      'La influencia' no la he visto, pero me la anoto. Gracias por el aporte.

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  3. ... te llevo siguiendo mucho tiempo, pero nunca te había dejado un comentario. Me ha encantado este post y las películas que reseñas (aunque no he visto todas... pero ahí van a mi baúl de películas pendientes).

    A mí me impresionó cuando vi por primera vez El inquilino. Don Evaristo el protagonista (Fernando Fernán Gómez) cuando ya se queda sin su familia y sin poder afrontar la orden de desalojo, se queda con todas sus pertenencias en la calle a la vista de todos los ciudadanos y vecinos y grita: "Pasen señores, pasen.Es gratis. Diviértanse viendo al ciudadano sin hogar. ¿Lo ven? Yo ya resolví mi problema. Ésta es la vivienda moderna sin una sola gotera. Y para ser feliz del todo sin familia que estorbe"... Y entonces tengo escalofrios porque es algo totalmente real y actual.

    Si esta película terminase con esta escena (y con la respuesta de sus vecinos...) estaría menos en olvido y sería más recordada.

    ... Roy Bean tiene razón, LA INFLUENCIA de Pedro Aguilera es un golpe duro y seco. Y es tremendo asistir a la caída sin colchón, y hacia al abismo más negro y oscuro, de la protagonista.

    Besos
    Hildy

    PD: Si me das permiso, me gustaría enlazarte en mi blog en la columna OTROS APASIONADOS CINÉFILOS.

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    1. Pues gracias por seguirnos y por animarte a comentar, Hildy :-)

      'El inquilino' es una joyita. Cuando la vi también me impresionó. Todo un mazazo cargado de crítica contra la situación que se estaba viviendo de aquella, y que por desgracia en tantos puntos que trata sigue resultando de actualidad.

      Sin duda, el final original que termina con él en la calle (el que nombras) es mucho más adecuado y cuadra más con el tono de la película que el final feliz que forzaron a ponerle. La copia que encontré para ver, venía con el final de verdad y detrás figuraban escenas y frases censuradas y el final que obligaron a añadirle para poder reestrenarla.

      Como ya le dije a Roy Bean, me anoto 'La influencia'.

      P.D.: Tienes permiso para enlazar el blog donde quieras, por supuesto.
      Por cierto, ¿cuál es tu blog? Porque me suena mucho tu nombre pero ahora mismo no caigo. Con la cabeza que tengo...

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    2. Perdóname, es que yo con las nuevas tecnologías soy tremenda... soy de máquina de escribir (je, je, je)... con tanta maravilla que hay en la Red pues mi blog se diluye en el ciberespacio es: EL BLOG DE HILDY JOHNSON (www.hildyjohnson.es).

      Ya me dirás si alguna vez te has cruzado conmigo en el ciberespacio o si es la primera vez que me ves.

      Gracias por el permiso... te enlazo pero ya...

      Besos
      Hildy

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    3. Pues sí que te he visitado alguna vez en tu casa, pero en "modo silencio". Y me suena también haber leído algún comentario tuyo en algún blog. :-)

      Te he enlazado en nuestra Carta de Blogs. Si por lo que sea no quieres que te enlacemos, dínoslo.

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  4. Buena selección de películas, como siempre. Alguna no la he visto y alguna otra debería revisarla, pues la vi hace mucho tiempo.
    Vistas esas películas hoy en día, se ve que lo único que ha cambiado es nuestra forma de ver la vida, pero los problemas con la vivienda siguen siendo los mismos o peores y eso es consecuencia de que sólo han cambiado de nombre y color las autoridades corruptas de turno, pero los especuladores siguen siendo los mismos de siempre. Si en España, en lugar de vender empresas para invertir en ladrillos, se hiciera al revés y se hubieran empleado los beneficios del ladrillo en crear empresas, otro gallo nos cantaría, pero hay demasiados intereses...

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    1. Está claro que hay cosas que no cambian. Y lo peor es que no solamente parece que no se aprende de los errores pasados, sino que se vuelven a cometer si cabe acrecentados. Como dices, hay demasiados intereses. Y al final quienes nos llevamos la peor parte de los chanchullos de unos pocos somos siempre las mismas personas.

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  5. Me uno a las felicitaciones por esta excelente entrada.

    Realmente el cine, cuando se pone en modo retrato de la realidad más allá de las historias personales en torno a el amor o el desamor, se convierte en una herramienta muy potente.

    Historias de Madrid no la he visto todavía, pero las otras son todas buenísimas.

    La que tengo más fresca es El Inquilino, que vi hace poco en la forma que dices gourmet: montaje original y posterior montaje de escenas cambiadas por la censura. Es muy instructivo verla así, porque deja muy a las claras la visión que se nos mete a sangre y fuego desde los poderes públicos relacionada con el problema de la vivienda: si no lo puedes solucionar, es porque eres un fracasado, punto. La frase que la censura le obliga a decir a Fernán Gómez es degarradora: "no se puede uno dormir en la suerte" (o algo así)

    Solo diré una cosa más de momento, muy cinematográfica por lo que supone de acción:

    Un desalojo, una okupación.

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    1. Efectivamente, el cine es una herramienta muy, muy potente.

      Como dices, es muy interesante ver así 'El inquilino', con los cortes y modificaciones, para ver claramente la manipulación a la que fue sometida y cómo afectan esos cambios al mensaje final. Sería estupendo poder ver así las tantas y tantas películas censuradas que existen...

      Gracias por las felicitaciones.

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  6. Felicitaciones, gourmets. Por la entrada, que es excelente, y por la iniciativa de denunciar, desde cualquier rincón -y las cocinas del cine son tan válidas como cualquier otro-, la deplorable situación que estamos viviendo en España (aunque el problema no es sólo nuestro).

    Otra propuesta. Anoche vi Carrie, de Wyler. Aunque el tema no es el desahucio -directamente- sí que aparece soslayado. Ambientada en el XIX, realizada en el 52... y lamentablemente, ¡actual! La escena 16 -censurada en su época- en la que retrata un "confinamiento" de indigentes sin techo es buenísima. Desde un punto de vista sociológico, es interesante ver una persona que goza de prestigio social, y sus habilidades son aplaudidas por todos, y al perder ese prestigio y después su casa, abocado a la indigencia, pierde todo respeto. Sus habilidades para el trabajo son obviadas en el mejor de los casos, despreciadas en la mayoría. Ya digo, aparece de pasada, pero ahí está. Wyler, siempre recomendable.

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    1. Gracias, Enrique. No descartes que sigamos utilizando el Cinefórum u otras entradas para denunciar algunos hechos y situaciones. De hecho no es la primera vez que lo hacemos :-)

      Carrie creo que la vi hace unos mil años o así (año arriba, año abajo). Me la anoto para repasarla. Gracias por la sugerencia.

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