Es una película entretenida, pero yo no la calificaría como la mejor película de los Coen, el comienzo es trepidante, te atrapa y te quedas maniatado en el asiento, la crudeza de las escenas de violencia ya sabemos todos que hay muy poca gente capaz de rodarlas como lo hacen los Coen. El personaje de Bardem me recordó en muchos pasajes a Henry retrato de un asesino pero el caso es que la historia llega un momento en que no progresa, quiero decir que noto como si en un momento dado no supiesen cuál es el giro que debían darle a la historia para hacerla creíble o para terminarla con éxito.
Mis peros vienen en la última media hora de metraje, la historia se para cual un loco maniático que en un estado de ansiedad y locura se para un instante y no sabe si tirarse por una ventana o dispararse a la cabeza. El personaje de Bardem me empieza a hartar e incluso la cara de Bardem que en los primero minutos de la peli me parecía genial ahora me resulta patética y ese peinado esperpéntico y absurdo.
El diálogo cuasi final entre Tomy Lee Jones y el viejo me pareció tedioso, al igual que la prejubilación del Sheriff, ahora estorbo en casa.
Pero no voy a quitar a mayo sus flores, la peli tiene calidad y está muy por encima de lo que tristemente es habitual en el cine actual, ese filtro fotográfico que imprimen los Coen a sus pelis me sigue cautivando.
6/10
Supongo que muchos ya la habréis visto. Las críticas ensalzan mucho esta película con la que me mostraba bastante reticente.
ResponderEliminarVarias historias se entrecruzan:
La de un cazador (Josh Brolin) que, casualmente, encuentra un dinero (entre un montón de cadáveres) y se lo apropia.
La del asesino (Bardem) que quiere recuperar el dinero antes que lo consigan los mexicanos.
La del sheriff (Tommy Lee Jones) que asiste, justo antes de jubilarse, a lo violento que se ha vuelto el mundo.
Sinceramente, me esperaba un encuentro final entre el cazador y el asesino. Era lo más normal. Pero pocos giros de la película son los esperados. En este sentido, me parece que los Coen abusan, logrando cierta artificialidad en el guión.
No contaré los desenlaces de las dos primeras historias, ya que revelan el devenir de la película. La tercera historia, en realidad, más que una historia en sí, es el contrapunto que permite la reflexión. Y la verdad, no era para tanto.
Las interpretaciones correctísimas. He evitado el doblaje, que suele cargarse bastante a Bardem (ya me diréis).
En fin, creo que los Coen han hecho cosas mejores. Y para mí que los tiempos de Barton Fink no volverán.