martes, 15 de septiembre de 2009

La leyenda del pianista en el océano

Desde el día que vi Cinema Paradiso Giussepe Tornatore se convirtió en uno de mis directores favoritos, nadie como él sabe buscar en el corazón de los espectadores y usar la magia del cine como elemento para desarmarnos y hacernos vulnerables a sus historias. La leyenda del pianista en el océano es una película bellísima en su ejecución, nos plantea la vida de un niño que es abandonado cuando era un bebé y es bautizado con el nombre de Novecento, allí se hace hombre en un barco del que nunca se baja, en él se hace pianista, como tal conoce a un trompetista de la orquesta del barco llamado Max y que es su único nexo de unión con el mundo exterior y con el que entabla una fuerte amistad.
En el barco su mundo es simétrico, le permite controlar absolutamente todos los aspectos de su vida, su mundo es finito, como las 88 teclas de su piano . El mundo fuera del barco hace que nuestro pianista tema no lo que ve, sino lo que no puede ver o lo que no puede controlar, si una cosa ha aprendido en el barco a través de las dos mil personas que van en cada viaje es que la condición del ser humano es ambiciosa por naturaleza, sus deseos de poder, de dinero, de un mundo inagotable e infinito, entonces entiende que en este nuestro mundo no encontraría una música que pueda tocar, no podría amar, y se plantea que ante esta inmensidad ¿cómo podría elegir una casa, o una mujer con la que casarse o una calle por la que pasear? Este nuevo mundo para él sería un barco demasiado grande, una mujer demasiado hermosa, un viaje demasiado largo, en él su música sería imposible de tocar.

La música de Morricone (una vez más y van no sé cuántas), es magistral y nos elevará de nuestro asiento llevándonos a través de un viaje transoceánico en el que cada nota es un halago para nuestros sentidos Esta obra maestra de Tornatore tiene los ingredientes necesarios y en su justa medida para dejarnos huella cinematográfica, un guión especialmente meticuloso con los vocablos elegidos, una historia épica, el anteriormente mencionado Morricone con sus composiciones musicales absolutamente memorables, la conjunción de un casting en estado de gracia (Tim Roth y Pruitt Taylor Vince) y una fotografía espléndida.
En este contexto la temática principal de la película es la amistad y el rechazo del protagonista a aceptar la condición del ser humano en nuestros días, entre los dos personajes principales magníficamente interpretados por Tim Roth y Pruitt Taylor Vince, sin embargo esta amistad no es suficiente para hacer recapacitar al pianista de que abandone el barco y no muera en él.
Recomendable y la califico como de indispensable visionado.








5 comentarios:

  1. Pues si es indispensable el visionado, habrá que visonarla. No había parado en esta película, parece interesante.
    Por otra parte, siento debilidad por la obra de Morricone.
    Se junta todo, promete.

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  2. Fíjate que tampoco me había percatado y eso que me dejo llevar por vuestro criterio, que siempre habeis acertado con las recomendaciones. Por lo pronto, yo me la he pedido :-)

    Por cierto, Cinema Paradiso... los pelos como escarpias!!!!!

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  3. Dos películas inolvidables, tanto La leyenda... como Cinema Paradiso. Ambas indispensables.

    Suscribo lo que dice la crítica casi palabra por palabra. Además, su estilo alegórico no tiene desperdicio: un hombre en un barco del que no ha salido jamás es también un símbolo de la condición humana.

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  4. Trasteando en una librería he visto un libro titulado "Novecento", de Alessandro Baricco. Lo saqué del estante para ver si tenía que ver con la peli de Bertolucci y ¡sorpresa!, al leer la contraportada resulta que es el relato en que está basada "La leyenda del pianista en el océano".
    Según cuenta Baricco:
    "Escribí este texto para un actor, Eugenio Allegri, y un director, Gabriele Vacis. Con él montaron un espectáculo que se estrenó en el festival de Asti en julio del presente año (1994). No sé si esto es suficiente para decir que he escrito un texto teatral, pero lo dudo. Ahora que lo veo en forma de libro, me parece sobre todo un texto que se mantiene en vilo entre una auténtica puesta en escena y un relato para leer en voz alta. No creo que exista un nombre para textos de esta clase. De todos modos, poco importa. A mí me parece una historia hermosa que valía la pena contar. Y me gusta pensar que alguien la leerá".
    Realmente el relato merece la pena. La historia atrapa, muy recomendable.
    La película aún no la he visto, pero la buscaré. Con que sea sólo la mitad de interesante que el libro (y de Tornatore me fío) ya puede ser un peliculón.
    Saludos y perdón por la chapa que os he dado.

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  5. Novecento no lo he leído, pero Alessandro Baricco siempre es interesante. Destaca su libro más conocido, un relato de unas 100 páginas llamado "Seda" que nos introduce en Oriente, y sobre todo, y a mí el que más me ha impactado "Océano mar" porque no es una narración al uso, e incluso con la sola visión de la escritura, ya parece un libro "anormal".

    Pero vamos, que ahora mi próxima lectura será Novecento, ya está claro. Muchas gracias por la recomendación

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